BRAVOS SIGUE APOSTANDO AL TALENTO MARGARITEÑO

El espigado lanzador margariteño Carlos González cumplió su sueño infantil y firmó contrato con Bravos, convirtiéndose en una valiosa pieza de cara al futuro del conjunto insular. 

“Es una emoción, me gusta mucho este equipo y, desde chiquito, siempre les decía a mis abuelos que quería estar aquí, firmar con los Bravos y se dio. Venía al estadio siempre a ver los juegos con mi mamá y mi papá”, contó el nuevo serpentinero bravo, tras firmar el pacto que lo une a los insulares.

Por su parte, el gerente deportivo del equipo, José Manuel Fernández, expresó su satisfacción por la llegada de González a las filas bravas. “Es un talento margariteño con buenos reportes de su proyección como lanzador y profesional, con un físico muy interesante para desarrollar. Reales de Kansas City está entre las organizaciones que ha mostrado mayor interés por hacerse de sus servicios. Le deseamos el mayor de los éxitos”.

Nacido en Juangriego, pero criado en La Asunción, precisamente sería en la capital neoespartana donde González dio sus primeros pasos en el deporte. “Mi papá y mi hermano juegan basket, ellos siempre intentaban animarme a que jugara también, pero nunca me gustó. Siempre quise jugar béisbol y comencé a los cinco años”.

Aseguró que, durante su infancia, jugaba campocorto y en los jardines, pero “luego comencé a lanzar, porque me gustaba más. Al montarme en el montículo siento que desafío a los bateadores y enfrentarlos”.

Asimismo, reveló que entre sus lanzadores favoritos están el recordado Yordano Ventura, Marcos Stroman y, de Bravos de Margarita, Omar Bencomo Jr.

El nuevo lanzador bravo se define como “un tipo tranquilo, no me gusta estar metiéndome con nadie, pero cuando estoy en la loma cambia mi actitud, soy más agresivo y voy con todo, a hacer mi trabajo”.  

El joven prospecto dejó un mensaje a la fanaticada margariteña: “Agárrense, que llegó Carlos González”.